ABSTRACT
En
el marco del surgimiento de la razón moderna, a partir del
proyecto iluminista, se comienzan a reconocer diversas posturas
teóricas en el devenir histórico de las categorías
de análisis integración y exclusión social. Este
proceso se considera se encuentra determinado por el imaginario que
de normalidad se va delimitando en las diversas
sociedades a partir de la ideología dominante que en su tiempo
y espacio tiende a la hegemonización. De esta manera, formar
parte de un nosotros y ser ubicado en un otros
marca un punto de partida y diferencia- importante.
Reconociéndose
la exclusión social como categoría de análisis
para el estudio de la pobreza y la marginalidad, se intenta retomarlo
-y con éste su opuesto complementario, la integración
social- como mediación para la construcción social del
concepto de discapacidad. Para la investigadora, resulta necesario no
sólo investigar el devenir histórico de ese par
dialéctico, sino reconocerlo a partir de algunas
determinaciones que se considera lo atraviesan, concretamente: poder,
ciudadanía y derechos. Asimismo, en esta lógica de
investigación, se conciben como determinaciones que atraviesan
la noción de discapacidad: alteridad, otredad, accesibilidad y
mistificación.
A
partir de ello, se analiza una experiencia que se considera
interesante en tanto reconocimiento y respeto por la diferencia, de
integración social de las personas con capacidades diferentes.
Esto es, el trabajo que a lo largo de la última década
ha venido realizando la Comisión de Gestión Social para
la Discapacidad de la Intendencia Municipal de Montevideo, en el
marco del proceso de descentralización municipal.