Una mirada histórica de La Intervención en Lo Social:

El torno como uno de los antecedentes fundadores de la minoridad

Por: Alfredo J. M. Carballeda


......"La preocupación por aunar el respeto a la vida y el respeto por el honor familiar ha provocado a mediados del siglo XVIII la invención de un ingenioso dispositivo técnico: el torno. Es un cilindro que gira sobre su eje y en el que un lado de la superficie lateral está abierto; el lado cerrado da a la calle y en sus proximidades hay un timbre. Una mujer quiere abandonar un recién nacido?. Avisa a la persona de guardia tocando el timbre. Inmediatamente el cilindro, girando sobre si mismo, presenta al exterior su lado abierto, recoge al recién nacido y, prosiguiendo su movimiento, lo introduce al interior del hospicio"..(Donzelot, J:1977 p.28)


El Torno y la Intervención en el territorio de la Minoridad

El origen de la conformación actual de las prácticas relacionadas con la minoridad, puede ubicarse, en Europa durante , el Siglo XVIII. En el caso de nuestro país durante el gobierno el Virrey Vértiz, aparecen los primeras establecimientos ; una Casa de niñas huérfanas y la Casa de niños expósitos, junto con las nuevas concepciones del tema. Estas nuevas formas institucionales, requerirán de nuevas prácticas y modalidades de Intervención. Estas generarán nuevos dispositivos de saber y conocimiento que irán moldeando a ese "otro" sobre el cual se intervendrá en el futuro.

La creación de la Minoridad, como lugar nuevo y especializado de saber, está atravesada en su origen por los ideales de la Ilustración que, tanto en Europa como en nuestro país, básicamente van a proponer un nuevo orden para toda la sociedad. En ese contexto, la minoridad es un nuevo territorio a descubrir y dominar, lleno de interrogantes y misterios.

Las recién creadas "ciencias del hombre" trataban de explicar como se originan las ideas, cual es su relación con las sensaciones, las relaciones entre las necesidades y las costumbres, el desarrollo de las facultades mentales, etc... De la misma manera que mas tarde se dará en la Antropología , la mirada se orienta hacia una búsqueda desesperada de los orígenes de una civilización que se consideró a si misma la cúspide del desarrollo de la historia. Se sabía sobre el presente, pero se le brindaba más tiempo a diseñar un futuro venturoso que terminó rodeado de holocaustos, desigualdades y genocidios en el siglo XX.

Pero también la mirada al pasado se tornaba indefectible y necesaria, había que encontrar o los gloriosos orígenes de la Europa racional o la oscuridad de una caverna donde se ratificaría la idea de progreso ascendente que, de apoco comenzaba a ser atribuida a un complejo de factores sociales y culturales que derivarán en lo racial.

La ciencia planteaba que era necesario explorar el pasado, pero que también el mismo, era posible que fuese ubicado en el presente , por ejemplo en una remota tribu de Oceanía. Arteramente, esta no será tratada con los honores del origen, sino que se analizarán sus potencialidades económicas, se le impondrá el progreso, trocando diferencias culturales por desigualdades sociales que en muchos la llevarán a su desaparición e introducción en una vitrina de museo para, al fin, ocupar un lugar en la escala ascendente del progreso indefinido.

Los niños y los pobres , en ese escenario son de algún modo , lo mas accesible de ese pasado que aterra y glorifica a la vez.

Todo debía ser convalidado, ratificado desde la observación empírica, era necesario que las ciencias de la naturaleza se desprendiesen de la filosofía, asegurando así la unidad ontológica y orgánica de las facultades biológicas de los hombres. Será verdadero de esta forma, solo lo "positivo", lo que sobresale , lo tangible, no queda lugar para lo subjetivo, para la memoria < en tanto inscripción>. Así en poco tiempo , los rasgos físicos determinarán conductas y marcarán pautas culturales de atraso o avance. El Positivismo Argentino será cien años después una prueba de esas cuestiones.

En definitiva se está construyendo y ratificando el orden de la modernidad que se impondrá lentamente en todo el mundo, racionalizando la vida cotidiana, asignando lugares y papeles a unos y a otros de acuerdo al lugar que ocupen en la distribución de las riquezas, obligando a mirar el mundo de una sola manera, atravesada por una ética cada vez mas afín al puritanismo.

En este caso, el orden que se crea va a comenzar a relacionarse con la vida cotidiana de los sectores mas empobrecidos de la comunidad.

El Torno, se transforma en un nuevo dispositivo, y muestra ciertas singularidades que como alegoría o metáfora servirán para dar forma y sentido a las prácticas e intervenciones que se estaban creando.

En principio, podemos pensarlo como una forma de ingreso a una Institución, a un nuevo mundo, al lugar de un orden diferente y opuesto del que se proviene.

De esta manera se construye un dispositivo aséptico, mecánico, que detiene y da otro rumbo a la historia de quien es abandonado. Pero, además, este nueva estructura, se enuncia como tal para el afuera, para los otros, es decir da señales hacia la sociedad. Ahora, el abandono no tiene los riesgos que pueden pesar sobre la conciencia, ya no queda -el niño abandonado- librado a la voluntad divina, al azar o a la providencia.

Un nuevo elemento, moderno, diferente, corta ese juego , genera nuevos significados y ocupa el lugar de aquellos. El abandono, queda ligado a un nuevo dispositivo. Si se quiere más técnico, pulcro, con menor riesgo .

El torno implica un orden, traduce una idea de funcionamiento institucional, su forma, su sentido, impactar en las prácticas.

Estas, tratarán de reproducirlo, de observarlo , de entenderlo, en definitiva de parecerse.

Además este mecanismo transformado en práctica de intervención , será la "puerta de entrada" al laboratorio de la observación de los otros, de los atrasados, de aquellos a los cuales no les llegó la civilización. De esta forma, la entrada aséptica a las Instituciones de Minoridad nacientes es también el ingreso a un laboratorio de observación de conductas, de pautas donde se tratará de componer clasificaciones que tendrán dos finalidades, por un lado seguir hurgando en los orígenes a fin de develarlos y por otro conocer en profundidad a aquellos a quienes se quiere dominar. De esta forma la Minoridad, como territorio será conquistado y colonizado en nombre de la civilización.

El torno, es de esta manera la institución, o, la prehistoria de ésta, todavía construida en forma precaria, pero, que, marca claramente sus significados e ideales.

Los Tornos, se multiplican en Francia, hasta que luego de un período de treinta años desaparecen; algo similar ocurre en la Argentina. Pero;¿qué los hace desaparecer?. Según Donzelot;.."Ahora, la madre que lleva a un recién nacido al torno de un hospicio no tiene ninguna intención de abandonarlo; si se separa de el es para recuperarlo unos días después con la complicidad de los mensajeros. Cuando los hospicios se llenaron de recién nacidos, pronto se dieron cuenta de la imposibilidad de darles en ese recinto los cuidados necesarios"...(Donzelot; J.1977op. cit). Es decir entregarlo a una institución a fin de darse un respiro, transformando ese paso en una forma también precaria y "robada" de asistencia, quizás reconstruyendo derechos que habían sido prometidos en el furor de la Revolución Francesa. Cuando sus protagonistas creían que el simple cambio de Régimen "mágicamente" iba a resolver las desigualdades que la propia Ilustración venía generando. De ese modo , la propia Revolución , llamará a ala asistencia "derecho límite" dado que el propio devenir de los hechos, o el funcionamiento de las proclamas resolvería de hecho los problemas originados en la desigualdad. Lo único novedoso, serán nuevos protagonistas en la escena de lo desigual y un cambio en las formas del padecimiento.

Se podría plantear que la desaparición de este dispositivo, puede deberse a la irrupción de otro que lo desplaza, que lo toma como antecedente y trata de hacerlo más eficiente; ese lugar es ocupado por las prácticas de la minoridad, en tanto Intervención..."El secreto del origen que el torno permitía se prestaba a toda clase de abusos y hacía perder la iniciativa a la administración. Organizando los servicios de admisión no sobre la base de la acogida ciega, sino el servicio abierto, era posible, por un lado, disuadir del abandono, y, por el otro, conceder las ayudas a partir de una investigación administrativa de la situación de las madres."....(Donzelot, J: 1977 op.cit.)

Torno y genealogía de la Minoridad

Estos dispositivos que van apareciendo, dan la posibilidad de poner en práctica nuevas cuestiones , fuertemente ligadas al origen de las prácticas y al pensamiento moderno, una de ellas es la clasificación. Se trata de partir de cero; el criterio clasificatorio, debe construir y hablar su propio lenguaje, necesita romper todo vínculo con el origen, conformar sus propios sentidos, introducir los nuevos códigos de la institución. Para las nuevas formas, el pasado es un obstáculo, que, tal vez, fatalmente se lleve en la sangre, por eso, cuanto mayor asepsia, mejores serán los resultados. De ahí , esa obstinación en negar la historia de cada sujeto, esta contamina, puede hacer convulsionar y contagiar a otros.

Por otra parte, la figura del abandono es la oportunidad de las instituciones de los nuevos Estados que se estaban conformando; ahora se puede modelar esa materia que ha sido abandonada, en este caso totalmente. Es, la posibilidad de poner en práctica el mito del buen salvaje y hasta corroborar la bondad del hombre "natural".

La figura del abandono, parcela esos lugares inscriptos en el cuerpo del menor. Ese primer contacto institucional ser indagatorio. ¿Cuánto se trae de la "bondad" de lo natural?, cuánto fue trasmitido en el mínimo contacto que se tuvo con la madre?, ¿cuánto se lleva en la sangre? Todas estas cuestiones se relacionan con nuevas formas de conocimiento, que requerirán otras prácticas, más meticulosas, que fragmenten, que generen, mas posibilidades de conocer.

La Ilustración, asociada a las nuevas formas de producción, necesitará de un conocimiento mas sistemático y profundo de la naturaleza, este, ya no podía ser solo contemplativo. Para esa ‚poca, conocimiento es sobre todas las cosas; poder y dominio.(García Orza, Rafael. El pensamiento del siglo XVII. Método científico y poder. CEAL1973).

A su vez, otra preocupación de las nuevas formas institucionales se relacionaba con otro plano de conocimiento;..."Superficie de absorción de los indeseables del orden familiar, los hospitales generales, los conventos y los hospicios sirven de base estratégica para toda una serie de intervenciones correctivas sobre la vida familiar. Estos lugares de concentración de infortunados, de míseros y de desgraciados facilitan la movilización de las energías filantrópicas, le dan un punto de apoyo, le sirven de laboratorio de observación de las conductas populares, de rampa de lanzamiento de tácticas apropiadas para oponerse a los efectos socialmente negativos y reorganizar la familia popular en función de imperativos económico-sociales"..(Donzelot, J:1977 op.cit.).

Cuerpo y alma, se mantendrán en esferas separadas, pero se ubicarán en un mismo plano de mirada, serán leídos por separado, pero, en un mismo espacio-tiempo. La separación de lo moral y lo material, estará planteada, pero al igual que en el presente, formarán parte de una misma ley.

La historia de esos menores, se canaliza ahora por diferentes carriles, búsquedas, formas de aproximación, de conocimiento, de poder.

Si analizamos al torno como dispositivo, podemos entenderlo como un mecanismo que va mas allá de su funcionamiento; tiene una ubicación, se para en un intermedio espacio-tiempo, pone un límite, mediatiza y genera nuevos sentidos.

El espacio limitante de la institución, implica ahora, la entrada a un mundo diferente, con un orden distinto. La forma dinámica de su estructura, aparece como una metáfora del funcionamiento mecánico que la institución proyecta hacia afuera y se propone a si misma. El torno, recibe, ordena, determina próximos pasos a seguir, propone ver mas allá de lo que se trae, e implica una nueva forma de registro. Entraña la necesidad institucional de mantener en secreto el origen, borrar el pasado, como mecanismo aséptico, plantea la descontaminación en cuanto a la historia. La pérdida del nombre, y la elaboración de una nueva identidad, sellarán este juego. Así, el torno fracasa, no cumple con las espectativas, es burlado en poco tiempo.

Pero, como dispositivo, su derrota en el plano de lo formal, implica que aquello que lo sustituya, llevará su sello. Las prácticas que ocupan su lugar lo perfeccionan, incorporan nuevos elementos, formas de conocer , de entender, de organizar la institución; pero, en definitiva , se le parecen.

El torno, surge como dispositivo correctivo de las conductas del abandono de menores, pero, la corrección va a apuntar más específicamente a la figura del menor, producir la especialización en este campo y servir como antecedente importante de las prácticas actuales, tal vez, mas allá de la minoridad.


BIBLIOGRAFIA:

-Carballeda, Alfredo J. M. Lo normativo y la educación. Artículo publicado en Margen; Revista de Trabajo Social. Oct. 1992.

-Donzelot, Jaques; La Policía de las Familias. Editorial. Pre -Textos. Valencia. 1979.

-Foucaul, Michel ; Vigilar y Castigar. Editorial. siglo XXI. Bs. As.1989.

-García Orza, Rafael;El pensamiento del siglo XVII. Método Científico y poder. CEAL. Bs. As. 1973.

-Rossi, Diana; Menores; historias de irregularidades y abandonos. Artículo. publicado en Margen; Revista de Trabajo Social. Octubre 1993.www.margen.org.